BUDA: EL ILUMINADO

Mitos budistas

Como el budismo es una filosofía de salvación, en teoría no tiene ningún uso para la mitología; pero en la práctica, los budistas de todos los países han acudido a las mitologías locales para rellenar su visión del mundo. En la India, donde surgió esta religión, las ideas sobre Buda se envolvieron en los ropajes de la mitología hindú y los dioses hindúes pasaron a ser espectadores y actores secundarios del drama de Gautama en su búsqueda del conocimiento, que culminó con su transformación en Buda, el Iluminado. Con la aparición del mahayana («gran vehículo») a principios de la era cristiana, los elementos mitológicos adquirieron mayor importancia y el culto a los Bodhisattvas constituyó la base de una floreciente mitología budista, si bien continuaron los antiguos motivos y narraciones. Al principio, estos Bodhisattvas debieron de personificar fundamentalmente los diferentes aspectos del carácter de Gautama, pero al cabo de poco tiempo desarrollaron una identidad muy real. Maitreya tipifica la maitri («amabilidad»): la vida bajo él es el milenio budista, pero, entre tanto, abandona el cielo Tushita para visitar el mundo bajo diversas formas con el fin de salvar y enseñar.