En los grandes mitos hindúes el mal es con frecuencia ambiguo y los antihéroes pueden ser personajes trágicos.
Ravana, enemigo de Rama, estaba condenado a salir del paraíso para nacer tres veces como demonio y ser tres veces muerto por Vishnu. En su primer nacimiento fue Hiranyakashipu, que fue muerto por Narasimha, cuarta encarnación de Vishnu; en su segundo nacimiento fue Ravana; y en el tercero se convirtió en Kamsa y le dio muerte Krishna.
Su enemistad con Vishnu fue su modo de contribuir al plan divino. Después de morir por tercera vez a manos de Vishnu, volvió al paraíso.