El sitar es el instrumento solista dominante de la música clásica indostaní, y suele ir acompañado por la tambura (laúd bajo) y la tabla (tambores). Es un miembro de la familia de los laúdes y está muy influenciado por el laúd persa de cuello largo, el tabor.
El sitar tiene cinco cuerdas melódicas, cinco o seis cuerdas graves (que también acentúan el ritmo base) y de nueve a trece cuerdas «simpáticas», colocadas todas ellas a lo largo de un cuerpo de madera en forma de pera.
Una de las personas que mejor ha conseguido hacer apreciar la música india en occidente es el músico y compositor Ravi Shankar. Nacido en Benarés, empezó su carrera como bailarín, pero luego decidió dedicarse al sitar. Ha realizado grandes giras por toda Europa y Estados Unidos, y en el año 1967 fundó la famosa Kinara School of Music en Los Angeles.