Thot, dios de la luna, que se representaba en forma de mandril, ibis u hombre con cabeza de ibis, tenía un vínculo especial con el conocimiento secreto de la magia. Su principal centro de culto estaba en Khemenu, Heliópolis para los griegos, quienes lo identificaban con Hermes.
El relato siguiente se escribió en época ptolomaica.
Un príncipe llamado Setna Khaemuese oye decir que un libro de magia escrito por Thot está enterrado en una antigua tumba cerca de Menfis. Irrumpe en la tumba y se encuentra con unos fantasmas, que le cuentan que Thot los mató por haber robado su libro de magia, que se encontraba en un cofre en el fondo del Nilo. Setna hace caso omiso de la advertencia, vence a los fantasmas con poderosos amuletos y se apodera del libro de Thot.
A continuación se topa con una mujer muy bella de nombre Tabubu que le seduce, pero antes de permitirle a Setna que le haga el amor, le exige que le dé todas sus riquezas y que mate a sus propios hijos. El príncipe accede, pero en cuanto se abrazan se ve solo y desnudo en medio de un camino.
Después descubre que sus hijos están sanos y salvos y que la hermosa mujer era un simple fantasma. Prudente, decide devolver el libro de Thot.