PIEDRA CALENDARIO

Los mitos de creación aztecas están representados en la impresionante piedra calendario. Descubierta en 1790 cerca del Gran Templo azteca de la Ciudad de México, el disco de cuatro metros de diámetro no es tanto un verdadero calendario como una visión monumental de las creaciones aztecas labradas en piedra.

En el centro está el rostro del dios sol Tonatiuh, flanqueado por dos garras gigantes y cuatro figuras que representan los cuatro soles previos, dedicados al jaguar, el viento, el sol y el agua. Alrededor de ellos hay signos de días del calendario sagrado y representaciones simbólicas de Tezcatlipoca, Quetzalcóatl y Tlaloc.

La piedra calendario nos recuerda la estrecha relación que había en la antigua Mesoamérica entre arte y mito.