Los mitos de los pueblos árticos hablan del poder de las mujeres y del conocimiento mágico que tienen algunas mujeres, así como de su influencia sobre los espíritus de los elementos y los animales.
En Groenlandia, una mujer que acababa de dar a luz pudo dominar una tormenta sorbiéndola en el aire y soplándola después. Hay mitos de Groenlandia que hablan de la muerte causada por una mujer que hablaba con los espíritus y les dijo que dejaran ir muriendo a las personas, pues de lo contrario no quedaría sitio en el mundo para que vivieran todos.
Las mujeres expresan las creencias míticas y religiosas de su sociedad fabricando ropas de piel. Al hacer hermosos adornos y cuidar de las pieles de animales, las mujeres están en disposición de satisfacer a los espíritus y de conseguir influencia sobre los espíritus de los animales, esenciales para la supervivencia del grupo. Pero también lo contrario puede ocurrir.
En el sudoeste de Alaska, por ejemplo, las mujeres debían tener cuidado de no atraparse el cabello en las costuras de las pieles de animales que estaban cosiendo. Si sucedía tal cosa, quien llevara la prenda podía tener desgracias.
También hay leyendas inuit sobre actos de mujeres que influyen sobre el resultado de la caza. En Groenlandia el éxito en la caza de una ballena depende en parte de que la mujer se quede en casa a oscuras hasta que el hombre vuelva a casa con la ballena.