Hanullim, el señor del cielo, es la deidad suprema del panteón coreano. En los mitos antiguos recibe el nombre de Hwanin, Chesok (un término budista) o Ch'onje. Una variante dialectal, Hananim o Hanunim, es el término coreano para el dios bíblico. San-shin, el dios de la montaña, gobierna sobre todas las montañas y es dueño y señor de todas las criaturas y objetos que en ellas moran. Muchos creen que es Tan'gun, el padre de la nación. El tigre es su mensajero.
Los espíritus que reciben los nombres de conde del río, conde del viento, señor de la nube y señor de la lluvia gobiernan estos fenómenos de la naturaleza. Los términos son similares a los de los hombres de los espíritus de la dinastía Zhou en China (siglos XI a III a. C.).