El mito de Chumong relata la historia del fundador del reino de Koguryo, un poderoso estado militar que gobernó la mayor parte de Manchuria y la mitad de la península de Corea desde el siglo IV al VII d. C. La narrativa mítica registrada en el Samguk yusa se compone de cuatro escenas que describen cómo: un rey descubrió a la hija del espíritu de un río que había sido raptada; ésta engendró un huevo gigante del que salió el héroe; éste huyó a causa de los celos de sus hermanos; el héroe estableció su reino.
La división en cuatro partes de las escenas narrativas sigue el esquema básico de los mitos de fundación de los tungús del nordeste de Asia, tanto de las sociedades más organizadas, como los manchúes, como los de comunidades más tribales. A diferencia del mito de Tan'gun, éste sólo se refiere al establecimiento del estado y no al origen cultural. También difiere de los relatos heroicos contados en Europa y en la zona del Mediterráneo que utilizan el motivo del vuelo del héroe desde su lugar de origen. En estos mitos, el héroe regresa al final a casa. En el mito Chumong, el héroe nunca regresa.