Nació:en Leeuwarden, Holanda, el 7 de agosto de 1876. Falleció: en Vincennes, Francia, el 15 de octubre de 1917.
Mata Hari fue una espía y famosa bailarina de striptease, condenada a muerte por espionaje y ejecutada durante la I Guerra Mundial.
Para algunos fue una espía legendaria, para otros apenas una embustera, y otros vieron en ella a una víctima de la Primera Guerra Mundial. Se hizo famosa como bailarina, no tanto por sus aptitudes técnicas o sus cualidades interpretativas como por el hecho de que lo hacía semidesnuda. Se dijo que su danza era una trampa y que operaba como doble agente. Al final de la guerra fue procesada, acusada de entregar secretos militares que habían ocasionado pérdidas inestimables. Y fue fusilada.
Se llamaba Margaretha Geertruida Zelle y era la hija de un sombrerero humilde con delirios de grandeza, cuyas costumbres estrafalarias heredó. Perdió a su madre a los trece años y su padre, incapaz de educarla razonablemente, la mandó a un colegio pupilo en el que la joven atrajo la atención del director, quien acabó acosándola.
Tenía diecinueve años cuando respondió aun anuncio de solicitud de esposa de un oficial holandés, con el que se casó y se fue a vivir a la India. Se dice que allí tuvo dos hijos, uno de los cuales murió presuntamente envenenado por su perturbada niñera. Poco tiempo después la pareja regresó a Amsterdam donde el militar se entregó al alcohol. Ella se fue a París dejando a la hija viva en manos del dipsómano.
En la capital francesa la suerte la cruzó con el Barón de Marguerie. Él la presentó en sociedad como una joven oriental y entonces comenzó la leyenda: el cambio de acento, las pulseras javanesas y su propia imaginación pintaron el cuadro. En adelante se llamó Mata Hari y se inventó un pasado en el que su madre era bailarina del templo de Kanda Swandi y ella había aprendido los ritos de la danza en la pagoda de Shiva. Las sensuales contorsiones de su cuerpo casi desnudo hicieron el resto. Bailando para soldados y políticos comenzó a urdir la trama de misterios más o menos verosímiles que circulan acerca de su vida, de la que a ciencia cierta no se sabe mucho. Lo que sí se puede corroborar es que se encontraba actuando en Berlín cuando la Primera Guerra estalló y que, por entonces, ella coqueteaba abiertamente con el jefe del espionaje de su país y cónsul alemán en Amsterdam.
El resto se compone de fragmentos de versiones en algunos puntos coincidentes: el alemán le propone sonsacar información a los franceses a cambio de dinero. Ella acepta y se convierte en la agente H-21, y acto seguido se ofrece en París a un precio módico para cosechar información útil del bando alemán. Se mueve a dos puntas, proporciona datos sobre maniobras alemanas e información acerca de misiones francesas. Hasta que surgen sospechas y es puesta a prueba. Ciertos movimientos la delatan y al fin es detenida por la policía. Mata Hari niega toda actividad en favor de Alemania y aduce haber contactado al enemigo a fin de informar a los franceses. Pero el consejo de guerra que juzga el caso la encuentra culpable y Mata Hari es condenada.
Se dice que Mata Hari acudió a su ejecución vestida de negro, con botas y sombrero de ala ancha y que antes de caer perforada por las balas saludó graciosamente a los soldados que estaban a punto de dispararle. También se cuenta que no quiso llevar vendados los ojos, e incluso hubo quien refirió que iba vestida con un tapado de piel debajo del cual no llevaba nada y que se despojó del abrigo antes de que se abriera el fuego.
Mito o realidad, lo que no se puede discutir acerca de Mata Hari es que se creó a sí misma, fuera quien fuese.
Nadie reclamó el cadáver de Mata-Hari, por lo que fue entregado a la facultad de medicina para que fuera utilizado en las investigaciones de los estudiantes. Por entonces, los cuerpos de los delincuentes que habían sido ajusticiados se aprovechaban en las clases de anatomía. La cabeza de la bailarina fue embalsamada y expuesta en el Museo de Criminales de Francia, hasta que fue robada por un necrófilo.