Aqueloo

Este término pertenece a la mitología Griega

La más importante vena fluvial de la Grecia. Según unos, hijo del Océano y Tetis. Según otros, del Océano y la Tierra. De sus amores con Melpómene nacieron las Sirenas. Luchó con Hércules por el amor de Dejanira, hija de Oene. Hércules le arrancó un cuerno, de cuya cepa brotó el agua que fertiliza la tierra; y las ninfas lo convirtieron en el cuerno de la abundancia, llenándolo de frutas y de llores. Aqueloo fue venerado en toda Grecia, se le representó en las monedas, y en el mito primitivo toma entre otras formas diversas, la de un toro, la de un trueno rugidor y la de una serpiente, símbolo del rayo. Los egipcios le rindieron los mismos honores que al Nilo.