Este término pertenece a la mitología griega
Centauro, hijo de Ixión y de una nube
Se ofreció a Heracles para cruzar a Deyanira al otro lado del río Eveno, y cuando lo hizo intentó raptarla, pero Heracles lo mató de un flechazo
Antes de morir dio su túnica empapada con su sangre a Deyanira, diciéndole que tendría la virtud de atraer el amor del héroe, Si éste la abandonaba
Tiempo después Heracles abandonó a Deyanira por otra mujer, y ésta envió la túnica a Heracles con la esperanza de recuperarlo
El héroe se cubrió con ella, y como estaba impregnada de un poderoso veneno
murió abrasado por el mismo.