Este término pertenece a la mitología azteca
Uno de los seiscientos dioses procedentes de los seiscientos Tecpatil
Delegado por sus hermanos, acudió a su madre, Citlalicué, para obtener seres que les adoraran y sirvieran; por consejo de ésta obtuvo de Mictalantecutli las cenizas y huesos de un muerto, que rociaron con su sangre, y así, obtenido el cuerpo, se lanzó a correr con él, pero se le cayó rompiéndose en muchos pedazos, los cuales llevó a sus hermanos; los colocaron en una redoma y los rociaron con sangre, surgiendo en seguida un hombre y, a los cuatro días, una mujer, primera pareja de la especie humana.