El panteón nórdico cuenta con poderosas divinidades femeninas. Las más destacadas eran Frigg, la agraciada esposa de Odín, y Freyja, diosa de la fecundidad y la sensualidad. En ocasiones se ha indicado que son aspectos de una única diosa: Frigg representaría a la esposa y madre y Freyja a la querida y amante. Compartían además algunas funciones: se invocaba a ambas en los partos para proteger y ayudar a la mujer y también estaban relacionadas con el acto de dar nombre al recién nacido.
Había otras diosas más relacionadas con la fertilidad. Algunas de ellas son seguramente meros aspectos de Freyja y Frigg: Saga, Hlin, Vor, Syn y Snotra parecen ser aspectos de Frigg, mientras que Sjofn, Lofn y Gefion parecen aspectos de Freyja. Fulla y Gna eran damas de honor de Frigg.
Atendían a Frigg, le llevaban el cesto, cuidaban de su calzado y compartían sus secretos. Algunas otras diosas eran en realidad gigantas que habían adquirido el estatuto de diosas debido a su matrimonio en la comunidad de los dioses. Skadi, esposa de Njord, era hija del gigante Thjazi, pero había sido aceptada entre los Aesir y al parecer era venerada por derecho propio. Gerd, esposa de Freyr, procedía también de estirpe de gigantes y alcanzó la categoría divina por el matrimonio.