Las versiones escritas de mitos asirios son pocas en número y siguen muy de cerca pautas babilónicas, debido a la gran influencia de la cultura y la literatura babilónicas entre la élite asiria.
La principal deidad nacional era Assur, una especie de dios atmosférico relacionado estrechamente con el rey asirio. En la versión asiría del mito de la Creación, Assur asume el papel de Marduk. Otras deidades importantes eran Ishtar, que tenía consagrado un templo enorme de gran antigüedad en Nínive; el dios de las tormentas, Adad; Ea, el gran mago de los dioses; y Nabu, hijo del dios babilónico Marduk y patrón de los escribas.