La idea de un espíritu auxiliar está muy extendida en las tierras bajas de Sudamérica. Es la eficacia de la alianza del chamán con su ayudante la que determina el éxito al tratar con el mundo sobrenatural. Los espíritus auxiliares pueden ser fantasmas de antepasados, animales poderosos -como el jaguar o el águila- o incluso humo de tabaco, cristales brillantes o relámpagos.
Para los waiwai, los espíritus auxiliares llamados hyasi colaboran en los nacimientos acompañando el alma del recién nacido al cielo para que pueda recibir su nombre espiritual. El chamán mataco obtiene su ayuda espiritual del pájaro mítico yulo, mientras que para los canelos quechuas, las abejas y las avispas son ayudantes espirituales.