Los temas principales de la mitología de las tierras bajas son los referentes a la regulación de la sociedad humana y su relación con el mundo natural. Estos temas suelen estar unidos, aparecen ¡untos en los mitos de creación que relatan cómo surgieron la luz y el orden, cómo los animales -y, a veces, las mujeres- eran los maestros originales de la tierra, y cómo el hombre usurpó su posición.
Otro tema dominante es la cultura humana frente al mundo salvaje de las bestias. En estos mitos, el origen del fuego es una metáfora de la vida civilizada, fue arrebatado al ¡aguar que ahora vive como los hombres antes. Las inversiones, transformaciones y equilibrio son características clave del mito amazónico.
En esta zona, el fuego simboliza creación y vida civilizada, según la mitología kayapo de Brasil, las primeras gentes no tenían fuego y comían los alimentos crudos como los animales.
Un día, un chico joven, Botoque, fue abandonado por su cuñado mayor mientras recogían huevos de guacamayo en la jungla. Tras varios días de comer los propios excrementos, Botoque vio un jaguar que llevaba un arco y una flecha y diversas piezas de caza. El ¡aguar prometió no comérselo y, en su lugar, se ofreció a adoptarlo como hijo y compañero de caza. Botoque se subió a lomos del jaguar y fue con él a su guarida. Allí, el chico vio fuego y comió carne asada por primera vez.
Debido a la hostilidad de la esposa del jaguar, éste enseñó a Botoque a hacer un arco y flechas. Cuando la mujer lo amenazó, él la mató con una flecha, recogió algo de carne cocida, sus armas, unas cuantas brasas y regresó a su pueblo. Al ver estos estupendos regalos, los hombres fueron a la casa del jaguar, le robaron el fuego, carne cocida, y arcos y flechas. Enfurecido por el comportamiento de su hijo adoptivo, el jaguar come ahora su comida cruda, mientras los hombres toman la suya cocida.